Beneficios de la Anestesia Regional, Versus Anestesia General en pacientes embarazadas.

Viernes, 09 Febrero 2018

La anestesia peridural y la anestesia raquídea son técnicas que se utilizan para insensibilizar parte del cuerpo, que permite al paciente no sentir dolor durante el procedimiento quirúrgico y a la vez mantenerlo despierto.

El espacio epidural, que se encuentra solo en el canal vertebral, entre el ligamento amarillo y la duramadre medular, también llamado espacio peridural o extradural, es el lugar donde se deposita el anestésico para lograr dicho bloqueo y este se distribuye en forma ascendente y descendente bloqueando los nervios espinales en todo su trayecto desde la medula espinal hasta los orificios intervertebrales correspondientes y este espacio se extiende desde el agujero occipital hasta la membrana sacro coccígea a nivel de la segunda vertebra sacra ( S2); mientras que, en el bloqueo raquídeo llamado también espinal, intradural, e intratecal, el anestésico se deposita en este espacio donde se mezcla con el líquido cefalorraquídeo.

 La cantidad de anestesia utilizada en la anestesia peridural va desde 15 a 20 cc de lidocaína al 2% con a sin epinefrina, mientras que en la anestesia espinal se utiliza de 2 a 2.5 cc de bupivacaina pesada al 0.5%; también es utilizada la bupivacaina simple al 0,5% en el bloqueo peridural, de 10 a 15 cc de acuerdo con el peso de la paciente; aunque por su alto grado de toxicidad no es muy utilizada en pacientes embarazadas.

Entre los beneficios que podemos citar de este tipo de anestesia están, mantener la consciencia de la paciente, pocos efectos sobre el sistema cardiovascular, respiratorio, y otros sistemas de importancia. Además, afecta menos estos sistemas, incluyendo el cerebro, la recuperación de la paciente ocurre sin los mareos, náuseas, vómitos y otras consecuencias de la anestesia general y con menos dolor.

También, podemos combinar estas dos técnicas para obtener mayor tiempo anestésico en aquellos procedimientos quirúrgicos que se prolonguen.

Esta técnica anestésica es la ideal para aquellas pacientes embarazadas que presentan una condición quirúrgica que no esta relacionada con su embarazo, por ejemplo, una apendicitis, colecistitis etc. ya que la anestesia general puede desencadenar aborto o parto prematuro.

   Otro beneficio de la anestesia regional es que se puede utilizar esta vía para administrar analgésicos y otros medicamentos junto con el anestésico local como la morfina, dexmedetomidina etc., con fines de reforzar la anestesia y mantener una analgesia postquirúrgica sin la necesidad de utilizar analgésico por vía endovenosa o intramuscular.

 Por lo general las pacientes embarazadas se consideran siempre con estómagos llenos y al aplicar anestesia general puede facilitar una bronco aspiración, siendo esta una complicación muy temida.

Como todo procedimiento médico, la anestesia regional está expuestas a fracasos y complicaciones, pero gracias al entrenamiento y tecnología disponible y un manejo oportuno, estos riesgos son mínimos.  

 En conclusión, solo aplicamos anestesia general si existen contraindicaciones absolutas de la anestesia regional, como la negación de la paciente o rechazo de la técnica, sepsis, cardiopatías determinadas, sangrados significativos, emergencia obstétrica en que existe compromiso materno y/o fetal grave, hipovolemia materna  severa sin tiempo para corrección, fallas o imposibilidad de realizar anestesia regional.

 

Dr. Héctor Matos
Gerente Departamento de Anestesia.